Me dices que el 2007 fue un año difícil, duro, mucho muy duro. Puedo creerte. Puedo.
Pero también puedo mencionarte que en el 2007 publicaste dos libros, terminaste tu maestría, avanzaste en tu tesis.
En el 2007 tu hijo creció, aprendió a leer mejor, a hacer cuentas más rápido. Tu hijo genio siguió brillando, te siguió abrazando y besando.
Seguiste trabajando en dos, tres -¿cuántas escuelas?- para que adolescentes lean y alguno, aunque sea uno, se enamore de los libros -o aunque de sea uno-.
No faltabas al taller, ahí seguiste: comentando, sonriendo, leyendo.
No abandonaste tus blogs. O sí, pero para abrir otro y otro y otro.
El 2007 quizá, y por ello, haya sido muy duro. Pero ya es 2008, ya tienes tu tesis terminada y ya tienes fecha de examen y ya tienes una beca para un proyecto compartido... Y tu hijo ya descubrió a Mafalda.
Pero también puedo mencionarte que en el 2007 publicaste dos libros, terminaste tu maestría, avanzaste en tu tesis.
En el 2007 tu hijo creció, aprendió a leer mejor, a hacer cuentas más rápido. Tu hijo genio siguió brillando, te siguió abrazando y besando.
Seguiste trabajando en dos, tres -¿cuántas escuelas?- para que adolescentes lean y alguno, aunque sea uno, se enamore de los libros -o aunque de sea uno-.
No faltabas al taller, ahí seguiste: comentando, sonriendo, leyendo.
No abandonaste tus blogs. O sí, pero para abrir otro y otro y otro.
El 2007 quizá, y por ello, haya sido muy duro. Pero ya es 2008, ya tienes tu tesis terminada y ya tienes fecha de examen y ya tienes una beca para un proyecto compartido... Y tu hijo ya descubrió a Mafalda.
Comentarios
:-)
Sólo te acompañaba calladita en línea.
Besos a ti.