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Suerte de disculpa

Cuando estoy muy metida en un proyecto literario me enconcho, convierto mi mundo en un espacio hermético. Mis amigos me pierden.

Soy muy torpe.

Me siento con miles de cartas en las manos, buscando la mejor estrategia, temiendo fallar. Pero es un juego solitario, donde solo cabe el soliloquio: es decir, el bullicio atropellado de todos esos personajes dentro de mí.

Comentarios

El soliloquio tiene su razón de ser: te gusta hablar con gente inteligente, digo.
No te preocupes por los amigos, yo entiendo. Además que como que eres adicta al trabajo. Tú vive.
jejeje, ¿cómo sabes que soy adicta al trabajo? :-)
Anónimo dijo…
mmm... ¿adicta? eso quien sabe... pero de que sí ocupa mucho mucho mucho de tu tiempo... eso no lo puedes negar. besos.
Aire no sólo no me considera adicta, sino que me perdona mi ostracismo :-)
Sol dijo…
te lo perdono? si no me ofende!!!

eres una amiga inigualable.

besos muchos.
Muchos besos de acá pa allá :-)
Aire, sabrás que Marian ha sido mi primer contacto ciber, todo por una "Flor de Capomo" y por eso también respìro AIRE (me gusta tu lunario)y saludo a TUTULI. Es grato acrecentar el mundo de amigos.
Y has de saber, Aire, que todavía le debo la letra en yaqui de Flor de Capomo.
Sol dijo…
jajajjajajajajja... bien... tal vez tutuli pueda conseguírtela más rápido, pero definitivamente tenemos que agradecerle a marian de que te haya impulsado. tu blog es uno de mis favoritos, lo visito a diario.
¿Ves, Coyote? ;-)
Cosa de tener "pacencia"
Ya está!

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