Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas de enero, 2016

tiempos

Hubo un tiempo en que deseaba con todo fervor traspasar el techo. Hoy quiero destrozar la puerta. Obra de Janaina Tschäpe 

Roque: 51

Mi madre siempre me contó que cuando yo era bebé, cada tarde mi hermano Roque me daba una vuelta a la manzana empujando la carreola. No recuerdo esa época, pero si aquella otra en que él era mi puerta al mundo masculino: Roque, a quien entonces llamábamos Toño, era quien me introducía en los juegos de mis hermanos hombres, siempre con delicadeza, sin burlarse, sin abusar.  Yo también le abría la puerta a otro mundo, ese que tenía yo, introvertida, fantasiosa. Teníamos una pequeña lámpara toda de cristal con estrías tornasol. La luz se refractaba en hilos que bailaban dentro de la lámpara. Yo podía pasar horas contemplando esa danza: elegía uno de los rayos y seguía su movimiento por largo tiempo. Una vez compartí ese juego secreto con él y lo entendió. Cuando caía la tarde podíamos pasar horas mirando la lámpara, eligiendo cada quien su hilo luminoso.  A veces he creído que ese juego fue lo que nos conectó. Pero sé que nuestro lazo fue anterior, y que sobrevivió más allá de esa l

Adiós

Cerrar el 2015 ha sido darle el portazo a una etapa. Otras veces he sentido que la mojonera está a unos cuantos pasos de mí, y aunque camino y camino, el punto se va moviendo a un futuro que parece inalcanzable. Hoy puedo decir: camino y la mojonera ha quedado atrás de mí, cada vez más lejos. No regresaré.