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Mostrando las entradas de julio, 2009

Una cuenta regresiva en el tiempo

Tengo el buen recuerdo de una reseña que hicieron a Cuenta regresiva , mi primer poemario, de la que guardo un afecto especial. Primero, porque era esa época cuando en Sonora se escribía más poesía, había un vigoroso suplemento cultural y había críticos de poesía. Cuenta regresiva ha sido más reseñado que cualquier otro libro mío. Segundo, porque la reseña crítica la hizo una de las mujeres que pasó por Hermosillo y dejó una huella profunda y silenciosa en muchas personas que la conocimos: excelente poeta, discreta conversadora, lectora acuciosa. Margarita Aguilar. Tercero, porque hizo una lectura de Cuenta regresiva muy propia y a la vez muy apegada a mi intención. Era yo una muchachita de 18 años, que acababa de salir de una agorafobia trepidante, y cuyas palabras estaban sepultadas en esa introspección invisible y muda de tan profunda. No me quedaba más que poner palabras en mis sensaciones, en mis paisajes internos, en mis inquietudes, en mis sombras, en mis silencios. Para mí es

¿Intelectuales o testigos?

Hace días Eve se preguntaba por la reacción de los intelectuales ante el incendio de la guardería ABC. Y me dejó pensando mucho. Después de 5 marchas, de diversos gestos espontáneos y ciudadanos, después de la presión social ejercida no desde los medios sino desde la entraña de la gente, después de que Hermosillo (tan individualista y encerrado) salió a la calle en cantidades y expresiones colectivas nunca antes vistas, puedo responder eso que me vino primero a la cabeza cuando Eve me hizo la pregunta ¿dónde están los intelectuales?: ¿Para qué queremos a los intelectuales? La información y las críticas y opiniones han circulado de correo en correo, de blog en blog, de llamada en llamada, de facebook en facebook. Los padres de los niños fallecidos han tenido voz por ellos mismos. Las familias de las víctimas han abierto su propia web. Ningún medio ha podido ocultar lo ocurrido. Porque los medios ya no son esos espacios maltrechos o no que estaban para dar voz a los que no la tenían. Hoy

Sábado, 4 de julio