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Rabito (2005-2011)


Divo hasta el final. Un infarto inesperado e inexplicable en la plenitud de la edad. Por suerte la Scottland Yard no está husmeando tu cuerpo buscando drogas. La única sobredosis que pueden acusarte es de amor y mimos, sobre todo ahora que tenías más manos para acariciarte; ah, y ropa en tu armario: desde impermeables, corbatas, gorros, hasta los suéteres más coloridos.

Te fuiste sin creerte perro en una escena digna de ER. Y, suponiendo que algún día te supiste perro, nunca reparaste en tu diminuto tamaño: siempre buscándole pleito a los canes más grandes que, con un solo movimiento de pata sobre tu pecho, detenían tus ímpetus prepotentes.

Te debemos el paseo por la playa y la plaquita con tu nueva dirección. Quiero pensar que ahora puedes cruzar todos los mares que gustes. Que no necesitas una dirección fija. Que ya no hay peligro de extraviarte ni de sufrir.

Cruza los caminos que desees, sube las escaleras que se te antojen. Te dejamos ir. Y que lo sepas: te amamos, Rabito. Te amamos de verdad.


Comentarios

Anónimo dijo…
Lo siento mucho. Nuestras mascotas llegan a adherirse tanto a nuestras vidas, que dejan un hueco al marcharse. Yo todavia extraño a mi gatito Rodolfo..
Blanca Ramirez.
Gracias, Blanca. Sí, es muy difícil pasar por estos duelos. Los animales son tan indefensos, que hay un dolor muy puro, sin matices. Este día especialmente está siendo difícil.
Un abrazo por Rodolfo.
Anónimo dijo…
Precisamente por eso nunca he tenido una mascota; me encariño muy facilmente, y perderlos me supongo debe ser muy triste; un gran abrazo Antonieta! y recuerda que nosotros hacemos los dìas difìciles con el solo hecho de pensar que asì son.
Abrazos!
Los momentos que dan a cambio las mascotas compensan el dolor de la pérdida. Así nos consolamos. O así nos queremos consolar. Fue un perro que aportó mucho a nuestra pequeña familia que de pronto se ha ensanchado. Pero te entiendo, durante mucho tiempo dejé de tenerlas por eso.

Gracias, saludos y bonito fin de semana :D
Anónimo dijo…
Qué bonita foto!
Dos divos de primera: Mariana y Rabito en el último cumpleaños de éste. Es linda la foto. Y muy lindo el momento que Mariana organizó entonces, como siempre, a todo detalle :D

Qué nostalgia por el bicho ese :')

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