¿Por qué cuando necesitamos sol para repiquetear el año que recién nace, sólo viene la lluvia?
Quizá para que veamos el cielo de ayer: un muro sombrío, despiadadamente metálico, invadido por las ráfagas doradas de un sol que reina sobre azules, nubes, metales, cerros, techos, cabelleras...
Y su corona, en arco multicolor, ciñendo las sienes del universo.
Quizá para que veamos el cielo de ayer: un muro sombrío, despiadadamente metálico, invadido por las ráfagas doradas de un sol que reina sobre azules, nubes, metales, cerros, techos, cabelleras...
Y su corona, en arco multicolor, ciñendo las sienes del universo.
Comentarios
Ese cielo tan amenazante, tomando en cuenta lo que pasó en Asia, era hipnotizantemente bello.
Hemos comentado repetidas veces lo difícil que es editar un libro, más de poesía.
Cuentas conmigo para este proyecto.
Con gran cariño,
Betty Gómez.