Este jueves 29 de enero, 11 am, presento la novela La reina baila hasta morir (Ediciones Fósforo, 2008) de Eve Gil, en el marco del Festival Internacional Alfonso Ortiz Tirado que organiza el Instituto Sonorense de Cultura.
Ceci de mi alma, Cuando leas esto ya tendrás 12 años. Una edad en la que las artes de la magia se convierten en empeño, esfuerzo, sabiduría forjada cada día, conciencia. Y eso te pediré hoy: un poco de magia para que me hagas estar contigo en ste momento, para que me sientas en tu corazón y en tu mente con la claridad con que me ves cada día a las seis de la mañana en la cocina, preparando todo antes de que te vayas a la escuela. Aunque, estando tan modorras, ¿podemos vernos con claridad? Mejor: con la claridad con que me ves cuando regresas de la escuela y me cuentas lo que pasó, mientras la comida termina de prepararse, y el celular suena y suena y suena con mensajes y el trabajo interminable, que tr fastidia un poco. Hay una escritora que dice que de alguna manera las mamás nunca podemos separarnos del todo de nuestras criaturas, porque hemos estado tan unidas una en la otra, desde el inicio de la vida, que es imposible. Y así como el misterio inicia, gestándose en el vientre
Comentarios
Que envidia estar en Alamos, Sonora. ES maravilloso y más en estos días de festivalcultural
Pásatela bien
Fred Alvarez
Lástima que no pudo ir vustra hija contigo.
Recibí información de Alamos recientemente a través de Sylvia http://orquideasymariposas.blogspot.com/
Conocí ese lugar allá en los inolvidables sesentas (tu no nacías) cuando era un "plebe", en una visita de un día. Me encantó; años después regrese y por lo que he leído y me dices se antoja estar un fin de semana y caminar, caminar y charlar con la gente.
Cualquirr día me descuelgo, PD.
Saludos
Fred Alvarez
PD: Saludos a vuestra hija.
Lástima que no pudo ir vuestra hija contigo.
Recibí información de Alamos recientemente a través de Sylvia Manríquez. http://orquideasymariposas.blogspot.com/
Conocí Alamos, allá en los inolvidables sesentas cuando era un "plebe" en una visita de un día. Se me hizo lejísimos, pero valio la pena. El lugar me encantó; años después en los 80 regrese y por lo que he leído y me dices se antoja estar un fin de semana y caminar, caminar y charlar con la gente.
Cualquier día me descuelgo, PD.
Saludos
Fred Alvarez